La noche del pasado lunes 1 de junio, falleció luego de sufrir un infarto, el joven de 40 años de iniciales J.C., proveniente de Venezuela. Las y los dirigentes de organizaciones migrantes han solicitado con urgencia el pronunciamiento de las autoridades frente a la difícil situación sanitaria y humanitaria que vive la comunidad extranjera en medio de la pandemia del COVID-19.
Esta semana se cumplen más de tres meses, desde que la comunidad venezolana espera una respuesta, ante la solicitud de un vuelo humanitario que les permita retornar a su país de origen. En un principio, fueron más de 300 personas que pernoctaron en las afueras de la Embajada ubicada en Providencia. Sin embargo, y expuestos a las deficientes medidas sanitarias, la cifra de extranjeros en dicho lugar, hoy supera las 600, quienes han debido ser trasladados a los distintos refugios dispuestos por el municipio.
Fue justamente en el Liceo Arturo Alessandri Palma, en donde falleció debido a un infarto, el joven originario de Valencia, que ya había presentado complicaciones médicas. Una de ellas, se registró el día 21 de mayo en dicho lugar, en donde la ausencia de su medicación y tratamiento oportuno para hipertensión, le provocaron una crisis. Hasta allí llegó la enfermera Francis Terán y su equipo médico, en donde fue socorrido de urgencia, logrando estabilizar su salud.
Al respecto, la presidenta de la Asociación de Enfermeros Venezolanos en Chile relata las deficientes condiciones sanitarias que presentaban los compatriotas en el albergue de Providencia, en donde solamente pudieron proporcionar medicación para un periodo acotado. La enfermera, explica el riesgo que implicaba para un paciente crónico como J.C., el riesgo al contagio de COVID-19, examen al que dio positivo y que se condice con los más de 25 casos que ya se registran en el lugar.
Debido a la complejidad de la situación que se vive en la comuna, diversas organizaciones como el Servicio Jesuita a Migrantes (SJM), la Parroquia Italiana y la Asociación Venezolana en Chile (Asoven), han aunado esfuerzos y se han puesto en contacto directo con autoridades municipales. Uno de ellos, es el concejal Jaime Parada, quien señala al respecto “me preocupa que la municipalidad teniendo los recursos que tiene Providencia, aporte en alimentación, calefacción, atención de salud y la disposición sanitaria (baños y otros) de la mejor manera posible, porque tenemos los recursos para hacerlo”, explicó.
Desde Asoven mediante un comunicado público, señalaron su preocupación por las más de 600 personas migrantes, entre las cuales se encuentran niñas, niños, mujeres embarazadas, adultos mayores y personas viviendo con enfermedades crónicas. Explican que las medidas hasta el momento son insostenibles a largo plazo, pues no dan abasto frente a la contingencia sanitaria actual.
En dichas misivas, la organización solicitó a las autoridades la reactivación del “Plan humanitario de regreso ordenado”. También, se instó a la flexibilización de las multas y estados migratorios de las personas que solicitan regresar a su país de origen y establecer una mesa de trabajo, con enfoque en la protección de derechos para el retorno seguro de todas las personas que lo soliciten.
Otra de las autoridades que se ha manifestado al respecto, es el director general de Asuntos Consulares, Inmigración y de chilenos en el Exterior, Raúl Sanhueza, quien señaló que los esfuerzos se concentran en tres aspectos, entre los cuales se destaca “interceder ante las autoridades migratorias nacionales y diplomáticas de terceros países para atender de la mejor manera a los extranjeros varados en Chile”, recalcando las acciones efectuadas por el país caribeño, tal como el vuelo realizado el día 6 de mayo, que permitió repatriar a más de 250 venezolanos.
Se espera, que los más de 600 venezolanos que se encuentran en los distintos albergues de la capital, logren tener una pronta respuesta desde sus respectivas embajadas, quienes, a través de la gestión de vuelos humanitarios, podrán dar una solución a las miles de personas que esperan regresar a su país de origen, para que no se repitan más historias como el fallecimiento de J.C., quien tuvo un trágico final lejos de su país y familiares.
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